Muchas veces hemos escuchado hablar de “los productores musicales” pero muchas personas no saben cuáles son sus funciones concretas a la hora de sacar adelante un proyecto. A continuación te detallamos cuáles son las principales tareas que tendrías que llevar a cabo en el futuro.
El proceso de elaboración del disco de un artista es largo y complejo; no consiste sólo en crear las letras, ponerles música… Una vez llevado a cabo el proceso creativo, tocan una serie de etapas: primero está la elaboración del presupuesto, por supuesto la grabación, hacer grabaciones adicionales, editarlo, llevar a cabo la mezcla y por último la masterización. ¿Y en qué partes tiene que intervenir la figura del productor musical? Prácticamente en todas. Vamos a ver en diferentes fases cómo ayuda en el proyecto final.
- Parte creativa. Interviene en los arreglos de voz y música, conoce como se lleva a cabo el proceso de mezcla y grabación, se desenvuelve dentro de las influencias musicales similares del artista e incluso la autoría de las canciones puede ser suya.
- Responsabilidades administrativas. En todo momento tiene pleno conocimiento del presupuesto destinado, es la persona que coordina la agenda de la producción del disco (reuniones, horarios, músicos…), y él mismo elige precisamente a los músicos.
- Funciones más personales. Tiene que conocer al artista, crear un buen ambiente de trabajo, sacar y potenciar la creatividad de ambos, tener liderazgo ya que las principales decisiones recaerán sobre él, saber manejar los recursos con los que se cuenta a lo largo del proceso y sobre todo tener un buen oído y talento musical para ser capaz de captar los posibles éxitos.
Por lo tanto, la figura del productor musical es esencial en el desarrollo de un disco y una profesión en la que se requiere mucha formación y talento.
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