Una de las partes más complejas de un proyecto audiovisual es la postproducción ya que determinará completamente como lo verá el espectador. Por eso hay que tener claro algunos aspectos como por ejemplo cómo hacer los cortes de edición.
- Intensidad. Un diálogo acalorado, una pausa dramática, un momento intenso… Estas son algunas de las circunstancias en las que podemos hacer un corte en la edición. Es una forma de pasar de un personaje a otro de forma que el espectador casi ni lo perciba.
- Movimiento. Otra forma de hacer un corte es aprovechar una escena en movimiento, ya sea mediante la cámara o a través de un objeto o personaje (un golpe, algo que cae…)
- Motivo. Si un personaje está mirando fuera de cámara, hace que el corte sea propicio en la edición. Es una forma de conseguir que la postproducción sea fluida y el espectador no pierda el interés.
- Mirada. Similar al punto anterior es cuando los ojos del personaje que aparece en cámara está mirando a un punto en concreto, ya sea con el movimiento de los ojos o manteniendo la mirada fija.
- Velocidad y acción. Cuando quieres hacer cortes en escenas de velocidad o mucha acción, es importante que los cortes de edición sean cortos y varíen grandes angulares con planos cortos. En pantalla habrá dinamismo aunque no hay que alargarlo demasiado ya que puede cargar al espectador.
Cortes en la misma escena
Cuando la edición se realiza en una misma escena, hay que tener otros aspectos en cuenta además de los anteriores. Para pasar de una toma a toma lo ideal es variar la distancia de la cámara, de esta forma será más natural para el espectador. El ángulo de cámara también es importante para mantener la atención; se recomienda que varíe al menos en 45 grados de una toma a otra.
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